Los trabajadores autónomos en España pueden acceder a la prestación por desempleo si cumplen ciertos requisitos, a pesar de que esta medida se implementó en 2015. Para obtener este apoyo en 2023, es necesario haber cotizado al menos 12 meses por la contingencia de cese de actividad y estar al corriente con los pagos a la Seguridad Social.
Para calificar, los autónomos deben demostrar que su cese de actividad se debe a causas económicas, técnicas, productivas u organizativas, acreditando una pérdida del 10% de sus ingresos. Otras razones válidas incluyen la fuerza mayor, pérdida de licencia administrativa o situaciones de divorcio o violencia de género.
Asimismo, pueden acceder a la prestación si se encuentran en un ERTE, lo cual se define como una reducción del 60% de la jornada laboral de sus empleados o si su facturación ha disminuido en un 75% en comparación con los dos trimestres anteriores. Las deudas con acreedores también son un motivo, siempre que no superen el 150% de los ingresos ordinarios.
Para solicitar la prestación, es fundamental presentar la documentación necesaria y demostrar que se está al día con las cuotas a la Seguridad Social.