El absentismo laboral se ha convertido en el mayor desafío para la economía española, con más de 1,5 millones de trabajadores ausentes cada día, de los cuales un 20% no tiene baja médica. Esta situación está generando un aumento significativo en los costos que enfrentan las empresas, afectando sus planes de contratación.
Las organizaciones empresariales han instado a alcanzar un acuerdo de Estado para abordar este problema. Según datos recientes, el coste directo del absentismo ha crecido de 10.134 millones de euros hace diez años a más de 32.000 millones de euros en la actualidad. Este incremento supera con creces el crecimiento de la población activa, que ha pasado de 18 millones a 22 millones de ocupados en el mismo periodo.
Los sectores más afectados son aquellos con mayor dependencia de la mano de obra, donde el aumento de las cotizaciones sociales y el coste del absentismo están limitando la capacidad de las empresas para expandir sus plantillas. Este fenómeno se ha agudizado desde la crisis del Covid-19, que marcó un antes y un después en el impacto financiero del absentismo.