Las acciones de Intel han sufrido una caída cercana al 2% en Wall Street tras un informe que indica que Nvidia ha decidido suspender temporalmente las pruebas de su proceso de producción en la fabricación de chips avanzados. Según Bloomberg, a pesar de haber probado el proceso denominado 18A, Nvidia no continuará con la siguiente fase de las pruebas.
Este proceso 18A es parte de la estrategia de Intel para consolidar su liderazgo en el sector de semiconductores en Estados Unidos. La compañía inauguró recientemente su fábrica Fab 52 en Ocotillo, Arizona, que es la primera planta en operar con producción masiva utilizando esta tecnología. Intel considera que 18A es su tecnología de fabricación más avanzada, diseñada para competir con Taiwan Semiconductor Manufacturing (TSMC).
Además, en septiembre, Nvidia anunció una inversión de 5.000 millones de dólares en Intel, coincidiendo con un movimiento del gobierno estadounidense para adquirir un 10% de participación en la empresa. Esta inversión fue interpretada como un esfuerzo estratégico para ayudar a Intel a recuperar posición en el mercado, aunque el acuerdo no implicaba un compromiso de fabricación de chips para Nvidia.