Las elecciones en Extremadura han resultado en una notable pérdida para el PSOE, liderado por Miguel Ángel Gallardo, quien ha visto cómo su partido se queda con 18 escaños, 10 menos que en 2023. A pesar de este revés, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha elogiado el trabajo de Gallardo y ha felicitado a María Guardiola por su victoria, aunque esta no haya logrado la mayoría absoluta necesaria.
Gallardo, que enfrenta un proceso judicial, ha decidido no dimitir y ha criticado la convocatoria electoral de Guardiola, describiéndola como un "experimento fallido" que ha llevado a un aumento de la inestabilidad. Según él, la elección no cumplió con el objetivo de obtener una mayoría y cuestiona el propósito detrás de la misma.
Por su parte, Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha interpretado los resultados como un rechazo al "sanchismo", sugiriendo que representan un cambio en el panorama político de España. La situación en Extremadura refleja una transformación significativa en un territorio que ha sido tradicionalmente un bastión del PSOE.